miércoles, 22 de febrero de 2017

El Cuentacuentos (340): El Reloj de Arena

Arena, arena y más arena. Mire donde mire sólo se ve una inmensidad de arena.
Un gigantesco desierto donde no hay nada sino arena.
Grandes dunas y un sol implacable que golpea sin dar tregua.
Todo se llena de arena, desde las notas hasta la ropa interior.
Pelo, orejas y otras partes de mi cuerpo siguen el mismo camino.
Sigo andando por inercia. No se si voy en línea recta o en círculos, pero tampoco puedo parar.
Necesito salir de este infierno en el que me he metido sin darme cuenta y del que no se como escapar.
Otra vez llego a la misma gran duna de siempre, intento subir pero la arena se desliza bajo mis pies.
Uso mis manos ,todo mi cuerpo pero me deslizó hacia abajo.
Me traga, me está engullendo pierdo pié y la respiración.
Se abre la arena bajo mis pies y me caigo por un agujero sobre otra duna.
A pasado otra hora más y todo vuelve a comenzar.

0 comentarios:

Publicar un comentario